Vivir de amor es darse sin medida, sin reclamar salario aquí en
la tierra. ¡Ah, yo me doy sin cuento, bien segurade que en amor
el cálculo no entre! Lo he dado todo al corazón divino, que
rebosa ternura. Nada me queda ya... Corro ligera. Ya mi única
riqueza es, y será por siempre ¡vivir de amor! Vivir de amor
es disipar el miedo, aventar el recuerdo de pasadas caídas. De
aquellos mis pecados no veo ya la huella, junto al fuego divino se han
quemado... ¡Oh dulcísima hoguera, sacratísima llama, en tu centro
yo fijo mi mansión. Y allí, Jesús, yo canto confiada y alegre:¡vivo de amor! «¡Vivir de amor, oh qué locura extraña -me dice el mundo-, cese ya tu canto!¡No pierdas tus perfumes, no derroches tu vida, aprende a utilizarlos con ganancia!»¡Jesús,
amarte es pérdida fecunda! Tuyos son mis perfumes para siempre. Al salir de este mundo cantar quiero:¡muero de amor!
Amar es darlo todo y darse incluso a si misma.
el cálculo no entre! Lo he dado todo al corazón divino, que
rebosa ternura. Nada me queda ya... Corro ligera. Ya mi única
riqueza es, y será por siempre ¡vivir de amor! Vivir de amor
es disipar el miedo, aventar el recuerdo de pasadas caídas. De
aquellos mis pecados no veo ya la huella, junto al fuego divino se han
quemado... ¡Oh dulcísima hoguera, sacratísima llama, en tu centro
yo fijo mi mansión. Y allí, Jesús, yo canto confiada y alegre:¡vivo de amor! «¡Vivir de amor, oh qué locura extraña -me dice el mundo-, cese ya tu canto!¡No pierdas tus perfumes, no derroches tu vida, aprende a utilizarlos con ganancia!»¡Jesús,
amarte es pérdida fecunda! Tuyos son mis perfumes para siempre. Al salir de este mundo cantar quiero:¡muero de amor!
Amar es darlo todo y darse incluso a si misma.
Santa Teresa del Niño Jesús (1873-1897), carmelita descalza, doctora de la Iglesia
Poesías «Vivir de amor» y «Porque te amo, María»