24/5/10

"Dios, habla conmigo"



Existe un poema que se canta en la lengua de los indios cherokees de los Estados Unidos y que dice así: “Un hombre susurró: «Dios, habla conmigo». Y un ruiseñor comenzó a cantar, pero el hombre no oyó. Entonces el hombre repitió: «Dios, habla conmigo». Y el eco de un trueno se oyó. Pero el hombre fue incapaz de oír. El hombre miró alrededor y dijo: «Dios, déjame verte». Y una estrella brilló en el cielo. Pero el hombre no la vio. El hombre comenzó a gritar: «Dios, muéstrame un milagro». Y un niño nació. Pero el hombre no sintió el latir de la vida. Entonces el hombre comenzó a llorar y a desesperarse: «Dios, tócame y déjame saber que estás aquí conmigo...» Y una mariposa se posó suavemente en su hombro. El hombre espantó la mariposa con la mano y, desilusionado, continuó su camino, triste, solo y con miedo”.

20/5/10

Comunicarse


Hoy os dejamos un excelente artículo de Junkal Guevara sobre Jesús comunicador y nuestro modo de comunicarnos en la era de la globalización, ¡que lo disfruteis! Pincha aquí.

15/5/10

Un lugar en Dios


Qué sentido puede tener la «Ascensión» de Jesús al cielo en una época en que ningún hombre lúcido se imagina ya a Dios como un ser que vive en un lugar celeste, por encima de las nubes?

Pero, sobre todo, ¿qué puede significar para nosotros un Salvador que ha desaparecido lejos de nosotros, cuando lo que importa de verdad es la solución de los problemas de nuestro mundo cada vez más graves y amenazadores?

Y, sin embargo, en este tiempo en que la progresiva explotación del mundo no parece ofrecernos toda la felicidad deseada y cuando se perfila incluso la posibilidad de un final catastrófico de la historia y no su consumación feliz, necesitamos escuchar más que nunca el mensaje que se encierra en la Ascensión del Señor.

Creer en la Ascensión de Jesús es creer que la humanidad de Cristo de la que todos participamos, ha entrado en la vida íntima de Dios de un modo nuevo y definitivo.

Jesús se ha ocultado en Dios pero no para ausentarse de nosotros sino para vivir desde ese Dios una cercanía nueva e insuperable, e impulsar la vida de los hombres hacia su destino último.

Esto significa que el hombre ha encontrado en Dios un lugar para siempre. "El cielo no es un lugar que está por encima de las estrellas, es algo mucho más importante: es el lugar que el hombre tiene junto a Dios".

Jesús mismo es eso que nosotros llamamos cielo, pues el cielo, en realidad, no es ningún lugar sino una persona, la persona de Jesucristo en quien Dios y la humanidad se encuentran inseparablemente unidos para siempre.

Esto quiere decir que nos dirigimos al cielo, entramos en el cielo, en la medida en que dirigimos nuestra vida hacia Jesús y vamos adentrándonos en él.

Dios tiene para los hombres un espacio de felicidad definitiva que Cristo nos ha abierto para siempre. Una patria última de reconciliación y paz para la humanidad.

Esto que será escuchado por muchos con sonrisa escéptica es, para el creyente, la realidad que sustenta al mundo y da sentido a la apasionante historia de la humanidad.

Y cuando se desvanece esta esperanza última, el mundo no se enriquece sino que se vacía de sentido y queda privado de su verdadero horizonte.

Los creyentes somos seres extraños en un mundo racionalizado, cerrado sólo a sus propias posibilidades, optimista unas veces y triste y desesperanzado otras, según los ciclos tan cambiantes de los éxitos y fracasos de la humanidad.

Pero somos seres gozosamente extraños que llevamos en nosotros una fe que nos ofrece razones para vivir y esperanza para morir.

J. A. Pagola

11/5/10

¿Quién...?

¿Quién quiere sumarse a lo pequeño?

9/5/10

Testimonio de paz

El evangelio de este domingo nos habla de la paz, la paz que nos deja Jesús. La paz de Jesús es una paz que desconcierta porque no siempre llega como podríamos esperar. A menudo nos encontramos en medio de situaciones que nunca imaginaríamos que puedan convertirse en experiencia de la paz de Jesús.
La siguiente historia tiene estas características, una situación violenta conduce a una ocasión de comunión. Nos la envía la H. Karolina, desde Cumaná...

"El día 26 de febrero de alguna manera especial viví una experiencia significativa que quisiera describir. La llegada de una persona que en la distancia se nos hizo cercana y que tuvimos la alegría de conocer personalmente. Se trata del miembro de la Junta directiva de Fe y Alegría que fue secuestrado el miércoles de ceniza, 25 de febrero, de 2009 y fue liberado el 2 de febrero de 2010, Germán García Velutini, llegó a nuestro colegio atraído por la lectura de las cartas de los alumnos.

Cuando conocimos la noticia del secuestro se les explicó a los alumnos y al personal, se repartieron volantes, se pidieron oraciones, se hacía oraciones en los salones... se le escribieron cartas, los alumnos desde lo que habían entendido de ese drama que es quitarle la libertad a otro, decían con sencillez lo que les preocupaba, se preguntaban cómo lo estarían tratando, qué le darían de comer, decían sentirse tristes por no poderlo ver, le animaban seguros de que saldría bien, le pedían que cuando estuviera libre los viniera a visitar, y otras tantas cosas que enternecían y expresaban la cercanía a él y a su familia en esos momentos tan difíciles, simplemente porque era de la familia, no le conocían pero era de Fe y Alegría. Con el transcurrir de los meses los alumnos de distintas edades y los del personal preguntaban qué habría pasado, qué se sabía, y realmente sabíamos poco, seguíamos rezando y así terminó el año y seguían las preguntas hasta el día en que se supo que había sido liberado, fue muy emocionante ver cómo todos lo comentaban con la alegría de saberlo ya libre con su familia, pero fue mayor cuando recibí una llamada en que me decían que quería venir al colegio, que había leído las cartas… fue una emoción que me dejó sin palabras y más aún ver la reacción en los que se iban enterando, algunos hasta lloraron de la alegría que quisiera venir a vernos, los alumnos mayores ayudaron a organizar lo que se podría hacer, se preparó un “libro” con los dibujos y escritos de los niños… ese saludo que cada uno quisiera hacerle, pero que no todos podrían hacerlo personalmente, recordando cómo rezaron para que fuera liberado, animándole para el futuro, agradeciendo que quisiera venir a conocerlos….

Fuimos a esperarlo al aeropuerto, nos habíamos acostumbrado a la cara de los volantes, los 16 kilos menos se le notaban, pero su sonrisa desde el principio hizo que fuera como un reencuentro con alguien que dejamos de ver una temporada, emocionante!, la alegría al llegar al colegio donde esperaban los de preescolar, primero y segundo haciendo calle de honor tenían globos y gritaban Germánnn… Impresionaba!! Germán iba saludando al personal y a los pequeños con alegría y a la vez sorpresa, por la emoción de todos, así entramos en la cancha donde un profesor daba la bienvenida y trasmitía mensajes, una alumna explicó a todos porqué estábamos alegres de que estuviera libre y la importancia de la libertad, los de la tarde trajeron unos títeres que ofrecieron un mensaje de bienvenida y alegría, un baile de primaria, dos canciones de los mayores que liberaron dos palomas cantando “color esperanza”, la entrega del libro de mensajes y el botón al mérito del colegio se cerró un acto sencillo en que participaron todos los alumnos del turno de la mañana y una representación de los de la tarde, luego el personal del centro compartió unos minutos en la biblioteca, mientras escuchamos canciones de alumnos que no pudieron hacerlo en el acto de la cancha, una vista rápida del colegio, y de ahí la visita a los otros colegios de Cumaná, un día completo y muy emotivo.

En San Luis fue una experiencia que a los niños les pudo dejar muchas enseñanzas, de hecho a todos nos las dejó, la sonrisa y la emoción del señor Germán, la de los niños y del personal, el ver que el dolor y la injusticia puede revertirse en cariño y en paz, en esperanza y en gozo profundo, que quitarle la libertad a alguien no lo alejó sino que lo acercó a los que le quieren bien, que de alguna manera nos hermanó… la cartas de los niños lo atrajeron, lo conocimos y hoy podemos sentirnos alegres y con la admiración de ver que en su sencillez y calidez de vida Germán es símbolo de lo que podemos hacer siempre, sacar el bien aún de las situaciones más adversas. Gracias al Señor por hacer del 26 de Febrero esa fecha especial, el día siguiente a la fecha en que fue secuestrado el año anterior."


H. Karolina Moreno


Si te interesa la noticia, puedes leer más en este enlace de la radio Fe y Alegría


6/5/10

Palabras del Papa ante la Sábana Santa


“El Sábado Santo es la tierra de nadie entre la muerte y la resurrección, pero en esta tierra de nadie, ha entrado Uno, el único, que la ha atravesado con las señales de su Pasión por el hombre: Passio Christi. Passio hominis. Y la Sábana Santa nos habla exactamente de aquel momento, testimonia precisamente ese intervalo único e irrepetible de la historia de la humanidad y del universo, en el que Dios ha compartido nuestro morir y nuestra permanencia en la muerte. La solidaridad más radical”.

“Dios, hecho hombre, ha llegado al extremo de entrar en la soledad extrema y absoluta del hombre, donde no alcanza ningún rayo de amor, donde reina el abandono total sin palabra alguna de consuelo: el infierno. Todos hemos experimentado alguna vez una sensación espantosa de abandono, y lo que más miedo da de la muerte es precisamente esto. Como los niños tenemos miedo de estar solos y la sola presencia de alguien que nos ame nos conforta. Es esto lo que ocurrió el Sábado Santo: en el reino de la muerte resonó la voz de Dios. Y sucedió lo impensable: el Amor penetró en los infiernos: también en la oscuridad extrema de la soledad humana más absoluta podemos escuchar una voz que nos llama y encontrar una mano que nos conduce fuera”. (Benedicto XVI)

ENCUENTRO SUPERIORAS AMÉRICA 2011

CURSOS INTERESANTES

ESPECIAL EUCARISTÍA (novedades!)

En esta sección iremos poniendo algunos documentos sobre la Eucaristía que nos pueden ayudar a vivirla con más profundidad.
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"Haced, Dios mío, que no desee ni busque nunca más que serviros en la forma que Vos queráis." (M. Alberta)