
En los Himalayas hay un tipo de ciervo que es conocido como almizclero, porque genera un envolvente aroma que se denomina almizcle y que se propaga muchos metros a su alrededor. Pues bien, resulta que hubo un ciervo que se hizo adulto y comenzó a percatarse de la existencia de un aroma dulce y penetrante. Pero, ¿De dónde provenía ese olor? Quería saber de dónde procedía y comenzó a buscar incansablemente por todas partes el lugar donde se originaba. Olía y olía ese aroma peculiar, pero por mucho que buscaba aquí o allá no sabía en qué fuente se generaba. En su anhelo por hallar dónde o qué producía ese especial aroma, empezó a obsesionarse por querer descubrirlo.
Día y noche seguía con las pesquisas, rastreando todo tipo de parajes, a la búsqueda ya desesperada del sitio de donde provenía ese intenso perfume. Y así iban discurriendo los años. El ciervo no dejaba de buscar. ¿De dónde surgiría ese perfume? Recorrió enormes distancias, sin conseguir descifrar el misterio. Así se consumía su vida y un día, todavía en busca del origen del aroma, le sobrevino la muerte sin haber podido ni siquiera sospechar que brotaba de sí mismo.
A menudo estamos tan identificados con nuestros afanes, anhelos y actividades, que vivimos de espaldas a nuestro propio ser, como un actor, que al identificarse completamente con su papel, termina por creérselo y deja de ser él mismo. y, sin embargo, el aroma de plenitud y serenidad halla su fuente en el interior. Es necesario dejar de dar vueltas alrededor del círculo para dirigirse hacia el punto central y recobrar la propia identidad.
Ramiro A. CALLE, Cuentos espirituales del Himalaya, Ed. Sirio, Málaga 2004, 19.
A menudo estamos tan identificados con nuestros afanes, anhelos y actividades, que vivimos de espaldas a nuestro propio ser, como un actor, que al identificarse completamente con su papel, termina por creérselo y deja de ser él mismo. y, sin embargo, el aroma de plenitud y serenidad halla su fuente en el interior. Es necesario dejar de dar vueltas alrededor del círculo para dirigirse hacia el punto central y recobrar la propia identidad.
Ramiro A. CALLE, Cuentos espirituales del Himalaya, Ed. Sirio, Málaga 2004, 19.